Lágrimas rojas
Estoy al borde del llanto viendo a Independiente caer por goleada frente a San Lorenzo. Este campeonato sufrí más de la cuenta porque no era para nada esperable un desempeño tan pobre del rojo, teniendo en cuenta las onerosas compras del invierno.
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Qué bueno que existe Roja Directa. Qué mal que juega este equipo. El único lírico, el Toti Ríos, se fue expulsado.
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Pienso en Marangoni, tan odiado al subirse al alambrado festejando la Supercopa en la Doble Visera con la camiseta de la Bosta. Lo que daría por disfrutar de un jugador así en este momento. Rezo por la vuelta del traidor Insúa Pocho. Rezo por la resurrección de un Insua Rubén Darío.
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Los tiempos cambian. Recuerdo un clásico con River, allá por el 93. Marchetta salió con un mediocampo inusitado para el paladar negro: Perico Pérez de 8, Desio al medio, Cascini corrido a la izquierda y Cagna de enganche. Desde la popular visitante, en el cielo de Núñez, a kilómetros del campo de juego, desgastaba mi garganta puteando el planteo timorato del técnico. Hoy ese esquema resulta natural. El doble cinco arruinó mi vida.
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Estoy harto de Pusineri, de Herrón, de la frialdad del Rolfi Montenegro, de las panzas de Puertas y Núñez. Estoy harto de esta cinta de Moebius que es el cíclico fracaso de Independiente.
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Qué bueno que existe Roja Directa. Qué mal que juega este equipo. El único lírico, el Toti Ríos, se fue expulsado.
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Pienso en Marangoni, tan odiado al subirse al alambrado festejando la Supercopa en la Doble Visera con la camiseta de la Bosta. Lo que daría por disfrutar de un jugador así en este momento. Rezo por la vuelta del traidor Insúa Pocho. Rezo por la resurrección de un Insua Rubén Darío.
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Los tiempos cambian. Recuerdo un clásico con River, allá por el 93. Marchetta salió con un mediocampo inusitado para el paladar negro: Perico Pérez de 8, Desio al medio, Cascini corrido a la izquierda y Cagna de enganche. Desde la popular visitante, en el cielo de Núñez, a kilómetros del campo de juego, desgastaba mi garganta puteando el planteo timorato del técnico. Hoy ese esquema resulta natural. El doble cinco arruinó mi vida.
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Estoy harto de Pusineri, de Herrón, de la frialdad del Rolfi Montenegro, de las panzas de Puertas y Núñez. Estoy harto de esta cinta de Moebius que es el cíclico fracaso de Independiente.
Yo tambien compañero no se puede perder asi sin sangre loco
el hombre suburbano
por
Anónimo, a las
10:45 p. m.
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