Dos cieguitos
mendigan en el subte
trajinando los vagones
de punta a punta
compañera de asiento
dice pobres los cieguitos
la sociedad nos enseña
a usar diminutivos
para referirnos
a gente desgraciada
por eso mis jefas
me llaman dieguito
trajinando los vagones
de punta a punta
compañera de asiento
dice pobres los cieguitos
la sociedad nos enseña
a usar diminutivos
para referirnos
a gente desgraciada
por eso mis jefas
me llaman dieguito
hay dos parejas en la linea B: una joven (son flaquitos) y la histórica (un viejo y una gordita).
Una vez entraron las parejas al mismo tiempo por cada punta del vagón, y apenas se escucharon mutuamente se quedaron como en suspenso, un minuto que duró como un siglo. me acuerdo que pensé " a ver si ahoran pelan unos fierros y se empiezan a cagar a tiros. nos matan a todos!!!"
por
Anónimo, a las
1:37 p. m.
Y yo, Anita toda la vida.
Sabía que algo no sonaba bien. Qué desgraciada soy!!
Me encantó el poema, amigo.
Besos!
por
Anita, a las
2:21 p. m.
De pedigüeña nomá...
quiero estar entre Jorge Asís digital y Prensa obrera.
Besos!
por
Anita, a las
1:18 a. m.
Acá hablamos de los históricos, una institución dentro del subte B. Y Anita, estaba pensando dónde ubicarte... cuando pueda tocar el template lo hago, serías como la Suiza (neutral) entre dos tendencias contrarias...
por
Suarez, a las
12:43 p. m.
excelente. Ahora entiendo hasta mi nombre...
por
Lunita, a las
6:11 p. m.
una joyita...
por
betina, a las
11:21 p. m.
Gracias, y pienso que habría que profundizar un poco más el tema de los diminutivos, algo que cada vez se usa más en ambientes "neutros" para suavizar órdenes y demás incomodidades.
por
Suarez, a las
11:42 a. m.
ME ENCANTÓ!!
Ahora, me preocupa reconocer que a veces me nombro a mí misma en diminutivo...
por
J R, a las
8:19 p. m.
jojojojo
tengo que contar algo.
ayer, salgo del teatro, tipo dos de la mañana.
decido no salir de pachanga (mucho frío), voy a la parada de colectivo, pero antes entro a un quisco en s ortiz y cordoba
sol: que tal, hay panchos?
quiosquero cancherito: panchito?
sol: sí, un pancho.
quiosquero cancherito: un panchito. ¿querés un panchito mi amor?
sol: eh, sí, un pancho quiero. ¿cuanto está?
quiosquero cancherito: el panchito mi amor?
sol: sí, el pancho.
quiosquero cancherito: de ayer o de hoy el panchito??
sol: ... qué?
quiosquero cancherito: de ayer o de hoy el panchito, mi amor?
sol: ...
quiosquero cancherito: porque el de ayer está 2 50, y el de hoy $2.
sol: no, dejá, no quiero nada.
decime ¿por qué tenía que decir taaanto panchito panchito? tenía una gorra que lo hacía más pelotudo aún.
Gaviota
por
la Dama sol, a las
1:07 a. m.
Ijmenijita... gracias y no te enrosques con los diminutivos, uno de los sostenes de tu estética. Y Sol, te tocó un pelotudito, qué le vas a hacer, encima con lo buena que está la expresión "superpancho", te das cuenta.
por
Suarez, a las
1:21 a. m.
Excelente poema, Diego, me encanta tu blog.
Sol:
yo lo conozco al del panchito cancherito, le falta mucho anden para llegar a superpancho...
Saludos!
por
Anónimo, a las
1:33 p. m.
Buenísimo Suarez, y sí, muchos me llaman en diminutivo
por
EmmaPeel, a las
11:16 a. m.
Gracias David y Emma... Dios nos libre de los diminituvistas
por
Suarez, a las
12:00 p. m.
Desde antes de nacer mi viejo dijo que su hijo se llamaría Jorge como él y le diría Jorgito. Por suerte me revelé y al año y medio me auto apodé Coque. Hablando de cieguitos, terrible es el del Subte B que va con la guitarra cantando "Yo no le canto a la luna porque alumbra y nada más" Menos mal ¿no? Te sigo en el de Clarín, y hoy conocí este. Muy bueno también.
por
Anónimo, a las
9:18 p. m.
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